viernes, 1 de mayo de 2015

Vamos a tomar unas cañas







Hora: 16:20
Lugar: Algún bar de Pamplona.

A love-struck Romeo sings the streets a serenade
laying everybody low with a love song that he made.
Finds a streetlight, steps out of the shade
says something like: “You and me babe, how about it?”

  • ¿Qué te parece si vamos a nuestro bar a tomar unas cañas?
  •  Ya no es nuestro... Olvídalo.
  • Sólo quiero hablar contigo. Como en los viejos tiempos.
     Caminan uno al lado del otro, evitando el roce, sin mirarse, en silencio. Tuercen a la izquierda y se meten en un bar. Para ellos, éste era diferente, en él se habían conocido y también habían desarrollado parte de su relación. En él habían mantenido conversaciones de horas enteras, y miradas con las que se transmitían todo. Siempre enfrente de unas cervezas. Pidieron en la barra y se sentaron en su mesa, la de la ventana, por la que entraba una luz tenue de mediodía. Una jarra esperaba a cada uno. Su última cerveza. Su última conversación.

Juliet says: “hey, it's Romeo!You nearly gave a heart attack!”
He's underneath the window, she's singing: “hey la, my boyfriend's back.
You shouldn't come around here singing up to people like that...
Anyway, what you gonna do about it?”

  • ¡¡¡CARLA!!! ¡No lo puedo creer! ¿Qué haces por aquí? 
  • Qué fuerte... El mundo es un pañuelo...¡Pero qué guapa estás! ¿Cómo está tu hermano? ¿Y tu madre? ¡¡Tía, cuánto tiempo!!
  • Pero no nos quedemos en medio. Anda, vamos a tomar unas cañas y me cuentas cómo demonios has acabado aquí.
     Caminan una al lado de la otra, mirándose excitadas, riendo y gritando de felicidad, “tengo tantas cosas que contarte...” “¿no sabes lo que pasó con Carmen?” “buahhh, ¡qué fuerte!”. Cada palabra es nueva e interesante. Frases que asombran, sonrisas incrédulas, y una amistad reencontrada. Llegan al bar y se sientan en una mesa de la esquina. Acompañadas de una cerveza se cuentan historias, cotilleos, relaciones fallidas, problemas, alegrías... Dos vidas.

Come up on different streets, they're both the streets of shame,
both dirty, both mean, yes, in the dream was just the same.
And I dreamed your dream for you and now your dream is real.
How can you look at me as if I was just another one of your deals?


     Le encantaba dar largos paseos y pasarse por su bar favorito a disfrutar de una cerveza en solitario. Disfrutaba cantando, aunque sabía que desafinaba, pero le gustaba hacer reír y así lo conseguía. Por encima de todo, le gustaba ese bar, el de la esquina del nombre raro: la sensación que despertaba en su interior al entrar y escuchar siempre la misma canción, el mismo viejo disco de Dire Straits, y cómo disfrutaba cuando, mientras lo escuchaba, cerraba los ojos y bebía lentamente, saboreando cada sorbo, tarareando cada compás. Tenía muchos amigos, muchos planes e historias; pero, sabía que lo que más le llenaba, lo que más le hacía feliz, era sentarse en esa barra con su cerveza callada como compañera y Mark Knopfler cantando a Julieta.

Juliet, the dice was loaded from the start
and I bet when you exploded in my heart.
And I forget, I forget... the movie song.

When you gonna realize it was just that the time was wrong, Juliet?


No hay comentarios:

Publicar un comentario